El vendedor invidente.

La agresiĆ³n sufriua con un pedazo de botella en sus ojos hace 23 aƱos hizo que Freddy Corredor perdiera su vista. En ese momento parecĆ­a que los sueƱos y las esperanzas por vivir se hubieran acabado para este hombre. Pero fue solo hasta que el amor de su esposa y las ganas de ‘comerse el mundo’ lo hicieron despertar y darse cuenta de que a pesar de su discapacidad, aĆŗn le quedaba algo que le habĆ­a heredado a sus padres: la berraquera de un rolo.

usaquen bogotĆ”Desde ese momento este hombre, quien actualmente tiene 47 aƱos, se las ingeniĆ³ y empezĆ³ a buscar la forma para sacar adelante a sus cuatro hijas y ayudarle a su esposa, pero sobre todo, para demostrarse a sĆ­ mismo que podĆ­a ir mĆ”s allĆ” de lo que la gente pensaba.

“EmpecĆ© a pensar que me podĆ­a poner hacer. Al ver sobre todo la situaciĆ³n econĆ³mica en la que me encontraba decidĆ­ montar mi puestico de dulces. Eso no solo me sirviĆ³ para estabilizarme en cuanto al dinero sino tambiĆ©n me ayudĆ³ sicolĆ³gicamente. Sentirme ocupado fue bueno porque quedarse uno encerrado en la casa, empeora las cosas", contĆ³ el valiente hombre.

Su rutina. 


Todos los dĆ­as a las 8:00 a.m. Freddy se levanta. Su esposa le alista algo para llevar de comer y emprende su viaje desde el barrio Villa Nidia (UsaquĆ©n) donde vive, hasta la calle 122 con carrera 15, donde tiene ubicado su ‘puestico’.

AllĆ­, pasa horas enteras esperando a que los clientes lleguen y cuando lo hacen, no solo los atiende con la mejor actitud sino tambiĆ©n con una astucia difĆ­cil de creer. Pues ya tiene claro en dĆ³nde estĆ”n ubicados los dulces y las colombinas. “Desde hace 21 aƱos estoy trabajando aquĆ­. Hasta las 10:00 p.m. todos los dĆ­as. Conozco cada rincĆ³n de mi puesto. SĆ© en donde estĆ”n los dulces y los cigarrillos. La plata tambiĆ©n la conozco muy bien. Las monedas son fĆ”ciles de reconocer por el tamaƱo, pero los billetes son los que se me dificultan mĆ”s", dijo el vendedor.

Su Clientela. Aunque Freddy es conocido en la zona como uno de los vendedores mĆ”s ‘buena papa’, hay muchas personas que se han aprovechado de su discapacidad y su inocencia. “Hay muchas personas que son muy bonitas conmigo y me dicen que soy un berraco, pero hay otras que se aprovechan, aunque no generalizo, pero sĆ­ hay muchas", expresĆ³. Por ahora Freddy dedicarĆ”, segĆŗn dice, muchos dĆ­as mĆ”s a cumplir esta labor que aunque no es fĆ”cil, le enseĆ±Ć³ a superarse, a creer en sĆ­ mismo y, sobre todo, a valorar a su familia, la que siempre ha estado con Ć©l.


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