La sensual mujer aprovechaba sus encantos para hurtar a los hombres que, llevados por su embrujo, ignoraban sus negras intenciones. Su fachada se cayó el pasado lunes cuando fue capturada en el barrio La Belleza (San Cristóbal), a pocos metros del lugar en el que mató a un hombre en medio de una práctica sexual.
Una víctima fatal
Nathaly era buscada por las autoridades desde el pasado 26 de enero cuando fue encontrado el cuerpo sin vida Gilberto Cetina, de 30 años. Junto a su cadáver fue hallado un celular. El teléfono, conforme se comprobó, era de la mujer quien lo olvidó en su afán de huir de la escena del crimen.
Con esa primera pista se inició una exhaustiva investigación realizada por el CTI y la Sijín de la Policía que terminó con la captura de la temible Nathaly, quien cambió en varias ocasiones de vivienda para no ser atrapada.Los hechos.
En la tarde de aquel domingo (26 de enero), Nathaly ingresó a una cancha de tejo en el barrio La Belleza. Su forma de caminar y su mirada no pasó desapercibida ante Gilberto Cetina, quien sin dudarlo la invitó a compartir unos tragos. Las horas pasaban muy rápido y este hombre se sentía cada vez más atraído por la joven, algo que Nathaly notó rápidamente y que le dio paso a su plan.
La astuta mujer susurró al oído de Cetina que fueran a un lugar con más privacidad. Gilberto ignorando lo malo, pidió media botella de aguardiente y llevó a la desconocida mujer a un pequeño cuarto en el que él pagaba arriendo en la calle 40 sur con carrera 7 este (La Belleza). En la euforia del momento, Nathaly puso un somnífero en la bebida de Gilberto y luego le propuso un divertido juego sexual, que terminó por ser un macabro crimen. “Con una sabana ató las manos y los pies de su víctima a una cama. Luego de unos minutos llevó a cabo su plan. Amordazó al hombre y le introdujo en su garganta relleno de almohada, hasta asfixiarlo”, se escuchó durante la audiencia en la que legalizaron la captura de Nathaly.
La mujer, desesperada por huir del lugar, empacó como pudo un televisor y se llevó, según los familiares de la víctima, 11 millones de pesos que guardaba el trabajador de una empresa de telecomunicaciones. En su carrera por escapar ocurrió lo del teléfono. A lo largo de estos ocho meses, esta mujer trabajó en oficios varios y cuidaba de sus dos hijos. Pero los fines de semana seguía con su modalidad de hurto. “Llegaba a los bares se acercaba a los hombres que estaban solos, pedía trago, los drogaba y finalmente los robaba”, mencionó uno de los investigadores de la Sijín.
De Nathaly se conoció que no tiene antecedentes judiciales, sin embargo, en su contra pesan ocho denuncias que aún están siendo investigadas por las autoridades. La mujer, además, convive en unión libre con un hombre mayor que ella. Es una mujer humilde que se ha dado algunos lujos con las ganancias de sus delito. Esta mujer en las últimas horas fue enviada a la cárcel El Buen Pastor, donde su belleza y seducción se apagarán.
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